El pasado 24 de mayo, festividad de María Auxiliadora, el claustro de nuestra Casa despidió a nuestro querido don Saturnino. Muchos han sido los años vividos en los cuales, hemos compartido muy buenos momentos y otros no tan buenos pero que siempre han estado acompañados por su cercanía, alegría y buen humor.
Queremos agradecerte todos estos años vividos, desearte lo mejor en esta nueva etapa de tu vida en la cual, seguirás estando en nuestros corazones y bajo el manto de tu Madre Auxiliadora.
Un abrazo de corazón, muchas gracias y hasta siempre.