Plan Lector en Secundaria. Curso 23 – 24

21 noviembre 2023

Pensamos que el desarrollo de un Plan Lector en el que esté implicado todo el Equipo Docente ayudará a nuestros alumnos en el desarrollo de sus propias capacidades y les facilitará la adquisición de los aprendizajes imprescindibles en esta Etapa y por tanto alcanzar los objetivos de la misma.

Es, además, un momento de transición desde una Etapa en donde la figura del tutor es casi omnipresente a otra en la que el alumno se ve obligado a un trabajo más autónomo e independiente, y la cantidad de textos a leer (sobre todo, textos expositivos) crece de forma sustancial con respecto a los cursos anteriores.

Si nos atenemos, por otra parte, a los datos habituales en cuanto a logros en el ámbito de la lectura en el alumnado de estas edades, es de esperar que en cualquier centro escolar sin una selección previa de estudiantes nos encontremos con aproximadamente un tercio del alumnado que no habrá superado los niveles adecuados, lo que nos obliga a realizar un planteamiento sistemático del aprendizaje lector.

De hecho, para una gran mayoría de los chicos y chicas del primer Ciclo de la Etapa, alumnado sin dificultades de aprendizaje de ningún tipo, el objetivo será ampliar tanto la autonomía personal al leer, como la variedad de estrategias de lectura comprensiva y el tipo de textos sobre los que se aplican.

Es de esperar que para otro grupo de alumnos el objetivo deba ser algo más ambicioso y haya de incluir la lectura de textos diversos relacionados con un mismo tema, que deberán leerse como si fuesen un solo texto complejo, así como la personalización de las estrategias de lectura o la iniciación en lo que podríamos denominar “lectura crítica”.

Del mismo modo, existirá con toda probabilidad un grupo de estudiantes, con un mayor o menor retraso en la adquisición de las habilidades y destrezas de lectura, que precisarán del refuerzo de los objetivos propuestos, pero no debe perderse de vista que este último grupo no es “algo raro”, sino el extremo inferior de habilidad lectora en una población que, no debemos olvidarlo, sigue en fase de adquisición de la lengua escrita.

Teniendo esto en cuenta, podríamos formular como metas propias y específicas del Plan  Lector dos en particular:

  1. Que los alumnos apliquen sistemáticamente en su actividad cotidiana las estrategias básicas de comprensión de los textos.
  2. Que  progresen de forma constante en las habilidades de autorregulación de la lectura, prestando especial atención a cuestiones como la adecuación de las estrategias de lectura a diferentes objetivos y la detección y solución de fallos en la comprensión de textos.

Por supuesto, a estos dos objetivos debe añadirse una meta relativa a la fluidez de lectura: que los alumnos sean capaces de leer sin titubeos y de forma expresiva los textos planteados en cada una de las asignaturas.

El Plan se desarrolla durante media hora de la jornada, y en la disposición que se muestra en el siguiente orden:

  • Primero ESO
    • Lunes: Lengua
    • Martes: Inglés (PLE)
    • Miércoles: Geografía e Historia
    • Jueves: Biología
    • Viernes: Tutoría
  • Segundo ESO
    • Lunes: Matemáticas – F&Q
    • Martes: Lengua
    • Miércoles: Inglés (PLE)
    • Jueves: Tutoría
    • Viernes: Geografía e Historia
  • Tercero ESO
    • Lunes: Geografía e Historia
    • Martes: Biología
    • Miércoles: Lengua
    • Jueves: Inglés (PLE)
    • Viernes: Matemáticas
  • Cuarto ESO
    • Lunes: F&Q – FOPP
    • Martes: Matemáticas
    • Miércoles: Biología
    • Jueves: Lengua
    • Viernes: Historia – Tutoría